TRANSMIGRACIÓN DE LA RUINA
EL PODER DEL PENSAMIENTO
El desarrollo del proyecto ha sido similar al acto de explorar una cebolla. Creo que la creatividad no obedece a ideas preconcebidas, sino que nos conduce a aquello que es necesario re-conocer.
Confieso que nunca intuí la dirección en la que me llevaría, ni los pasos que tendría que dar para ser consecuente con mi indagación. Desde el inicio me resultó clara la importancia de permanecer flexible, permitiéndome dirigirme hacia donde mi intuición me guiaba, lo cual, confieso, ha sido mucho más difícil de lo esperado. La complejidad con la que tropecé, me ha llevado a aceptar mi vulnerabilidad más de una vez.
Al principio escribía para comprender mi proceso interno, eventualmente caí en la cuenta que la palabra era indispensable para transmitir la idea de la importancia de nuestros pensamientos en nuestro diálogo cotidiano con ‘la vida’.
¿Cómo mostrar que mis pensamientos pueden afectar a otros, incluídos animales y plantas?

Pool, 2012

La práctica Hawaiana del Ho'oponopono se basa en el poder de la intención y el pensamiento para alterar la realidad.
Han habido tradiciones en la historia que se apoyan en esta relación, este espacio no pretende probarlo, sino sólo hacer una referencia y construir sobre ella. Un ejemplo práctico es el caso de Cleve Backster, un ex-agente de la CIA, que registró los efectos de sus pensamientos en plantas utilizando un detector de mentiras, el libro "La vida secreta de las plantas" refleja los resultados de su investigación. Jacobo Grinberg también viene a la mente, un investigador y escritor mexicano, quien propuso que lo que entendemos como realidad es el resultado de la interacción entre la mente y un campo de posibilidad ilimitada, el cual el llamaba la "lattice". La ironía es que aquello que fue creado no puede ser experimentado sino hasta hacerse concreto, como un evento a posteriori, dejando al creador en la ignorancia de su participación  en la implementación del presente. Interpreto que estas interacciones tienen lugar a través del uso de la palabra, los pensamientos y las emociones.
Neville Goddard es otro ejemplo, de alguien quien estudió este fenómeno a raíz de una experiencia mística vivida en su adolescencia, realizando muchas conferencias durante la


decada de los 50s sobre el poder del pensamiento. Más allá de los casos que menciono, hay muchos escritores y pensadores que han hecho referencia esta relación entre mente y materia.
No sorprende que las ideas de muchos de ellos han sido cuestionadas y hasta atacadas; entender el universo como un todo coherente siempre ha amenazado la noción materialista ya que pone en evidencia enigmas ante los cuales sólo podemos expresar profundo asombro. El entrenar a los niños a manejar la fuerza ilimitada de la mente cambiaría el mundo como lo conocemos, a través de la conciencia.
No es mi intención, ni el propósita de este projecto, el convencer. Considerar lo que expreso como posible o cierto, les resultará más fácil a aquellos con mentes menos escépticas, no tanto por lo que propongo, sino porque estas ideas podrían encontrar resonancia con su forma  intuitiva de entender la verdadera naturaleza del ser humano y de la vida.

(1) Kushner, Lawrence (1998). The Book of Words: Talking Spiritual Life, Living Spiritual Talk. Jewish Lights Publishing. p. 11. ISBN 1580230202.
EL AGUA

Masaru Emoto y Veda Austin, son dos investigadores que, en forma independiente, han explorado el efecto de formas pensamiento e imágenes sobre muestras de agua. Por increíble que lo parezca, han logrado plasmar  ‘impresiones energéticas’ en agua congelada. Emoto trabajó durante 15 años investigando el efecto del habla humana, pensamientos y emociones en muestras microscópicas de agua física, con resultados extraordinarios. Veda Austin una mujer con un don especial, ha hecho su propio trabajo con agua usando muestras macroscópicas. El trabajo de ambos encontró belleza incomparable a través de un fenómeno incomprensible al analizarlo utilizando nuestro actual paradigma científico.
Es posible influenciar agua con nuestro pensamiento.
¿Estamos imprimiendo una ‘forma’ energética en nuestra vida y la de otros, de la misma forma en que los investigadores imprimen una forma pensamiento en el agua?
En otras palabras, ¿Si yo espero una reacción por parte de una persona, estoy proyectando esta "forma energética" sobre ella? ¿Influenciando, a priori, su respuesta?
“Al proyectar la intención de paz hacia el agua, al pensar, hablar y actuar con la intención de paz hacia el agua, el agua puede traer paz a nuestros cuerpos y al mundo."
Masaru Emoto
La evidencia apunta claramente a un fenómeno extraordinario: Que los pensamientos pueden tener efectos tangibles a nivel físico, en nosotros mismos, en nuestra salud y en otros seres vivos. Tom Cowan comenta, en sus estudios sobre agua coherente: "La principal confusión de la ciencia moderna y de la medicina es sintetizada en la frase común dentro de la escuelas de medicina, 'Si no lo puedes medir, no es real'. Parece ser que esta afirmación es la base filosófica de la forma moderna de ver el mundo. Sin embargo ¿Qué decir del amor? ¿La valentía o la vulnerabilidad? Si no pueden ser medidas ¿significa esto que no son reales?"

Todos sabemos qué se siente percibir energía tóxica, o cuando una persona o lugar tienen un efecto benéfico en nosotros, esto sólo puede ser atribuído a aspectos, no medibles con aparatos, que sin embargo existen y ejercen una influencia en otros. Me aventuro a creer que la mayoría de las culturas indígenas a lo largo de la historia han respetado y honrado, si no comprendido, las inusuales características de esta substancia omnipresente; es la ciencia y cultura contemporáneas las que desdeñan este conocimiento inmemorial, olvidando lo extraordinario que es.
Cabe recordar que el ser humano, dependiendo la edad, está formado entre 50 y 85% por agua.

Viktor Schauberger, el padre de la anti-gravedad, la llamó "la sangre de la tierra", y afirmó: "si tratamos al agua sólo como un compuesto molecular, no sólo no le hacemos justicia sino que nos hacemos daño".
Dentro del contexto de este proyecto,  los mapas mentales hicieron evidente la presencia de conflictos e incongruencias que habitaban mi mente, ejerciendo una fuerte influencia en mi experiencia de vida. Muchos de estos valores —con frecuencia antagónicos— son abiertamente aceptados por las mayorías, reglamentos que, como rizomas, se extienden gobernando las ideas de vastos sectores de la sociedad.

Despertar de este sopor inducido, con sus múltiples ramificaciones emotivas y de pertenencia, no es una tarea simple, ya que implica una búsqueda de significado a nivel personal.
Podría arrojar luz sobre nuestra vida en un mundo caótico y fragmentado, el poder observarlo y trazar su orígen a las ideas que llevamos a dondequiera que vamos.

¿Que pasaría si fuésemos capaces de hacer a un lado los mensajes de separación y miedo, toda esta ubícua información recreada por la cultura contemporánea, reemplazándola por el deseo de crear una nueva realidad? ¿una que sí queremos? En el presente.
CONCLUSIÓN

A medida que fui tomando conciencia de estos valores conflictivos y llenos de juicio, a medida que disecté y observé el control que tenían sobre mí, comenzaron a perder fuerza.

Al compartir estas imágenes de agua invito al espectador a reconsiderar el colosal poder de la mente y de nuestras palabras, ellas muestran evidencia de ello de la manera más hermosa. La idea de bendecir, en lugar de maldecir, nuestra agua, alimento o a nuestros hermanos y hermanas toma un carácter totalmente nuevo.

Procedí a fotografiar muestras de agua, y estos resultados preliminares me han hecho darme cuenta del impacto de mi diálogo interno en mi vida y mi cuerpo. Somos agua, y estamos programando nuestras mentes y cuerpos con estos pensamientos, imprimiendo su expresión en forma física —sé que esto es difícil de creer, sin embargo estoy convencido de que es así. Esto se extiende a todo lo demás, a otros, animales, plantas y mucho más. 
Como las investigaciones del Instituto Heart Math confirman, la huella energética que emanamos se extiende más allá del cuerpo físico.
En relación con mis conclusiones a partir de los Mapas Mentales yo pregunto:

⊹ ¿Es el mundo que nos rodea un producto de valores como el egoísmo, el resentimiento y el miedo que vivimos día a día?

⊹¿El albergar rencor constituye una forma de cautiverio?

⊹ ¿Se puede romper el ciclo de revivir una ofensa y experimentar el dolor que esto conlleva?

⊹Y finalmente, ¿el perdonar puede liberarnos de una carga emocional que nos es dañina?

Es aquel que ha sido ofendido quien tiene la capacidad de perdonar. La ceremonia de perdón que aparece en la introducción, es un evento poco común, un audaz ejemplo de lo que es posible, el pedir perdón por las acciones de nuestros antepasados.
Una invitación a sincerarse, a reconocer el dolor y la culpa que la sociedad lleva a cuestas como consecuencia del maltrato a culturas indígenas a lo largo de la historia.
Tener esta conversación públicamente, tendría un efecto profundamente curativo al abrir la posibilidad de escuchar la historia de los demás.
La resolución  del conflicto, implica aceptar escuchar lo que hemos generado como seres humanos y llevamos a cuestas en silencio. Un espacio que clama atención y sin embargo evadimos tocar por su inmensa profundidad. Las redes sociales, con su incorpórea forma de relacionarnos, nunca podrán sustituir la experiencia de poner atención indivisa a la historia del "otro" dentro de un contexto honorable, de respeto y vulnerabilidad.
El campo de batalla nunca ha resuelto problemas al profundo nivel que un conflicto requiere; el reunirse en torno al fuego, sin armadura, a escuchar las voces de los que han sido ofendidos podría lograrlo, generando un espacio de respeto, equivalencia y, potencialmente fraternal.
Pedir perdón a grupos que han sufrido abuso constituiría un primer paso de inmensa importancia, haciendo a un lado el orgullo, para observar pacientemente el efecto generado...  en "ellos", en nosotros y en la sociedad en general.
A nivel personal y en relación a este proyecto, la "Transmigración de la Ruina" o reencarnación de la ruina consiste, para mí, en una toma de conciencia, en que la "ruina" (el recuerdo, pensamiento o sensación no deseado) es, conscientemente rechazada, transformándose, de ser una herencia impuesta por la emoción, ineludible y rígida, para convertirse en una propuesta al servicio de la voluntad en tiempo presente.
Fred Luskin , director del Stanford University Forgiveness Project (Proyecto del perdón de la Universidad de Stanford) considera el perdonar como un acto de amor propio.
Nuestra intención en este caso, proyecta aquello que queremos ver, dejando atrás, evadiendo, las conductas destructivas e invocando en su lugar un nuevo presente emocional, desacoplado del pasado—cambiando la historia que nos contamos a nosotros mismos.
Esta propuesta, emana de una experiencia individual, en relación con la idea de dar paso al cambio. Caí en la cuenta de cómo mis rencores me mantenían sometido a un pesar que ya no me resultaba edificante sino destructivo.
Mi intención es hacer estas preguntas, porque creo que la sanación social no es imposible, el movimiento pendular que genera el tráfico de rencores, puede ser intervenido al darnos cuenta que no es la única opción viable, aunque esto requiere madurez espiritual para considerarlo.
Esta es una invitación al amor propio, en lugar de recrear, asiduamente, aquello que nos trae profundo dolor.

¿Es posible optar por ver luz sin importar a dónde dirigimos nuestra mirada?

 Invoqué a Bárbara Guerrero "Pachita" (curandera Mexicana), a expresarse a través del agua.

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